El transporte público ha sido la base para el diseño de Madrid Nuevo Norte.

La proximidad del nuevo Centro de Negocios con la estación de Chamartín y con una extensa red de transporte público hará innecesarios miles de desplazamientos diarios, ahorrará energía y evitará atascos.

Estamos en plena Semana Europea de la Movilidad, momento en que toda Europa pone el foco en los desplazamientos sostenibles en las ciudades. Madrid Nuevo Norte, el gran proyecto de regeneración urbana de Madrid, se basa en un modelo de urbanismo orientado hacia el transporte (en inglés, Transit Oriented Development, o sus siglas, TOD). Eso quiere decir que la movilidad sostenible no ha sido un elemento añadido al diseño urbano, sino que la ordenación de la ciudad se ha creado precisamente a partir de la movilidad sostenible, como un elemento fundamental y prioritario del proyecto.

Más allá de dotar a Madrid de una red hiperconectada de transporte público, una parte importante de la movilidad sostenible consistirá en reducir los desplazamientos, y evitar que, para ir a trabajar, a comprar… haya que coger cualquier medio de transporte. Eso, en Madrid Nuevo Norte se consigue con una ciudad densa en la que los principales nodos de transportes coincidirán con los núcleos de mayor actividad.

Así, Madrid nuevo Norte dotará a la capital de tres nuevas estaciones de Metro y una nueva estación de Cercanías, que se sumarán a las ya existentes. Se crearán los dos nuevos intercambiadores de La Paz y Chamartín, el primero de ellos en superficie. El sistema contará también con una extensa red de autobuses urbanos e interurbanos y un innovador Bus Prioritario.

Una ciudad caminable, con vida en las calles y espacios públicos de calidad para ser recorridos a pie, así como una extensa red ciclista de 13 kilómetros, completan el sistema. Todo ello conseguirá que el 80% de los desplazamientos en Madrid Nuevo Norte se haga por medios sostenibles, y solo un 20% mediante coche privado.

El distrito de negocios de Madrid Nuevo Norte se ubicará junto a la nueva estación de Chamartín, evitando la necesidad de miles de desplazamientos diarios por la ciudad.

Pero hay un elemento que hace que la efectividad del transporte en Madrid Nuevo Norte se convierta en referencia a nivel regional y nacional: la nueva estación de Chamartín, que pasará a ser el corazón de la movilidad del proyecto, y también en el principal centro de la Alta Velocidad Española. Tanto la conectividad que conseguirá con el resto del país como su proximidad al aeropuerto Madrid-Barajas Adolfo Suárez son en sí mismos un gran valor. Esa conectividad excepcional ha sido aprovechada y potenciada al máximo para ubicar el gran distrito de negocios junto a la estación.

De esta manera, alguien que venga al futuro distrito financiero desde cualquier punto del país conectado por la Alta Velocidad, sólo tendrá que afrontar un corto desplazamiento hasta su destino (sea éste su oficina, su lugar de compras o de ocio), que bien se podría hacer a pie, en bicicleta o en otro sistema de movilidad no contaminante. Eso significará miles de desplazamientos menos al día, con el consiguiente ahorro energético y reducción de tiempos y de atascos. También propiciará una actividad diaria más saludable, ya que en ese escenario tendrán especial protagonismo los recorridos a pie y en bici.

Las infraestructuras de transporte público en las ciudades son fundamentales, pero han de acompañarse de un diseño urbano racional, en la vanguardia de las corrientes urbanísticas actuales. Esto, unido a tendencias como el teletrabajo y las nuevas formas de transporte, servirá para minimizar los desplazamientos y lograr una movilidad realmente sostenible para el futuro de la ciudad.