26 diciembre 2024
por Madrid Nuevo Norte
La remodelación de la Estación de Chamartín-Clara Campoamor, una nueva línea de Metro, una nueva estación de Cercanías, un gran Parque Central, puentes y pasarelas peatonales…, son solo algunas de las infraestructuras que el desarrollo Madrid Nuevo Norte legará a la ciudad y a las futuras generaciones. Porque más allá de un mero proyecto urbanístico, Madrid Nuevo Norte es un proyecto de ciudad, que, gracias a todas estas infraestructuras y al modelo urbano que plantea, no sólo mejorará la calidad de vida del área de actuación y los barrios limítrofes, sino la de todos los ciudadanos, conectando barrios, aportando mejoras en la movilidad y revitalizando zonas hoy degradadas.
Este proyecto de auténtica colaboración público-privada, en el que participan los tres niveles de la administración, supone, además, la oportunidad para que la capital pueda definir su modelo económico para las próximas décadas, apostando por un entorno en el que desarrollar las actividades económicas más avanzadas, relacionadas con la atracción de talento y la economía del conocimiento.
El transporte público será el eje vertebrador de Madrid Nuevo Norte. La renovación de la Estación de Chamartín-Clara Campoamor marcará un antes y un después en la movilidad de la región y de todo el país. Convertida en el complejo ferroviario más avanzado de Europa, esta estación integrará alta velocidad, Cercanías, Metro y autobuses, creando un nodo de transporte de referencia a nivel internacional. Su diseño vanguardista, junto con su capacidad de conectar toda España en pocas horas, la posicionará como un nuevo icono de Madrid.
Partiendo de ese importante hub, una nueva línea de Metro recorrerá longitudinalmente Madrid Nuevo Norte. Con tres estaciones estratégicamente ubicadas, conectará zonas residenciales y de negocios, garantizando que el 95% de las viviendas y oficinas se encuentren a menos de 10 minutos a pie de una parada de transporte público. Paralelamente, un sistema de Bus Prioritario, con más de tres kilómetros de plataforma propia, reducirá significativamente los tiempos de desplazamiento.
El gran intercambiador subterráneo de Chamartín permitirá acceder mediante una única infraestructura subterránea a autobuses urbanos e interurbanos, al Metro, a Cercanías y a la red de alta velocidad, así como al aeropuerto en menos de 15 minutos, facilitando el acceso al transporte público a miles de personas. Por otra parte, la nueva área intermodal de La Paz reorganizará el tráfico de autobuses interurbanos y urbanos junto al hospital Universitario La Paz y cerca de la estación de metro de Begoña, convirtiéndose en un punto clave en la conexión entre barrios, áreas de negocio y el complejo sanitario de La Paz.
Madrid Nuevo Norte será clave para coser la brecha que la playa de vías ferroviarias de Chamartín ha creado entre los barrios del norte. El cubrimiento de las vías, tanto al sur como al norte de la estación, no solo unirá estas áreas, sino que permitirá la creación del gran Parque Central, un gran espacio verde icónico que servirá como punto de encuentro y recreo para los madrileños.
Un nuevo espacio verde que se construirá frente a las torres de oficinas y viviendas y se levantará sobre las vías del tren con un diseño paisajístico singular, convirtiéndose en una de las mayores obras de ingeniería de este tipo a nivel internacional. En su interior, el parque contará con otro elemento destacado: el Jardín del Viento. Se trata de una estructura verde singular en forma de espiral que se erigirá en mitad del parque y quedará cubierta por vegetación, produciendo su propio microclima.
El proyecto también contempla la construcción de nuevos puentes, un túnel y una pasarela peatonal sobre las vías y sobre la M-30, lo que garantizará una conectividad fluida entre barrios que hasta ahora permanecían aislados entre sí y con el resto de la ciudad.
Otro de los pilares del proyecto es la renovación de las infraestructuras del Canal de Isabel II. Con la sustitución de más de 12 kilómetros de tuberías, por las que circula alrededor del 80% del agua potable de Madrid, se garantizará la máxima eficiencia en la gestión de los recursos hídricos a escala de ciudad. Una modernización que viene acompañada de sistemas sostenibles de drenajes urbanos y uso de agua regenerada para el propio desarrollo, pensados para enfrentar los retos del futuro aplicando las últimas tecnologías en la gestión hídrica.
El proyecto también incluye la remodelación de importantes nudos de tráfico, como el Nudo Norte y el de Fuencarral. Estas actuaciones no solo reducirán los atascos, sino que también disminuirán las emisiones de CO2, mejorando la calidad del aire y la seguridad vial. La reordenación del Nudo Norte, por ejemplo, ya ha demostrado ser eficaz en la primera fase de su implementación, con una significativa reducción de tiempos de desplazamiento y contaminación.